Copland: Orchestral Works, Vol. 3 - Symphonies

Presentación del Álbum

La Dance Symphony de Copland podrá sorprender a más de un oyente por su carácter a veces siniestro, incluso gótico, cuando el título evoca más bien una atmósfera desenfadada. El aura sombría de la obra, compuesta en 1922-1925, proviene de su concepción como ballet sobre un tema de vampiros, más o menos inspirado en la película expresionista Nosferatu de Murnau, rodada mientras Copland estudiaba con Nadia Boulanger en Francia. La Dance Symphony presenta numerosos giros rítmicos y armónicos influenciados, como lo reconoce Copland, por Stravinsky y el jazz. El programa prosigue con Statements («Afirmaciones» o si se quiere «Declaraciones»; 1932-34), «un ramillete viril, sincero, franco y directo» según la crítica de Virgil Thomson en el New York Herald Tribune. Los Statements se sitúan en el género distintamente modernista de la miniatura disonante y vigorosa, un poco en el estilo del Prokofiev de la misma época. Más tarde, Copland los calificaría como «piezas implacables», cuyo mundo sonoro ligeramente áspero difiere mucho del de sus obras impregnadas por tradiciones folklóricas más melodiosas.

La estrecha amistad que unía a Copland con Nadia Boulanger duró incluso tras la vuelta del compositor a los Estados Unidos durante el otoño de 1924, y ya en 1925 la célebre pedagoga e intérprete estrenó la novísima Sinfonía con órgano del joven compositor, con Walter Damrosch en el podio de la New York Symphony. Tras el estreno, Damrosch declararía que un compositor capaz de escribir tal obra con solo veintitrés años «estaría listo, dentro de cinco años, para cometer un asesinato». Copland, satisfecho con su obra, no tardó en darse cuenta que, dado el nombre reducido de grandes salas con órganos de calidad, una versión para orquesta sola tendría más posibilidades de ser programada. Remodeló su obra, distribuyendo la parte de órgano entre la madera, el metal y el piano. La renacida Primera Sinfonía fue creada por Ansermet y la Orquesta Filarmónica de Berlín en 1931, y es esta versión que publicamos, interpretada por la Orquesta Filarmónica de la BBC. © SM/Qobuz