Discípula de Wilhelm Kempff y Stefan Askenase, la pianista Mitsuko Uchida esperó a tener una edad respetable para grabar las Variaciones Diabelli de Beethoven, una obra mítica para pianistas a la altura de las Variaciones Goldberg de Bach para clavecinistas. Pero los pianistas son más afortunados porque hacen suya toda la música escrita para teclado.
Mitsuko Uchida talks Beethoven's Diabelli Variations (new album out now)
Decca ClassicsDesde hace años, Mitsuko Uchida interpreta estas Diabelli en concierto, recibiendo críticas muy favorables en todas partes. Tras seis años de silencio, su nueva grabación de estudio se esperaba con impaciencia. Producida en Snape Maltings, en el encantador marco de Suffolk de una antigua casa de malta que Benjamin Britten transformó en un centro cultural, esta nueva versión nos atrae desde las primeras variaciones por su vigor y su rigurosa construcción. Uchida domina infaliblemente esta obra monumental, que es suficiente para confundir incluso al pianista más temerario. Su experiencia en las composiciones de Beethoven le permite estar en total intimidad con esta larga partitura, que puede parecer aburrida bajo dedos y pensamientos menos ágiles. La gran pianista japonesa consigue captar la esencia de cada variación sin perder nunca de vista la estructura global de una composición que es un mundo en sí misma. Beethoven parece haber reunido todos sus conocimientos, pero también todos sus miedos y esperanzas en ella. Mitsuko Uchida capta los múltiples aspectos de esta obra fascinante y terriblemente intimidante.
