Shostakovich: Symphony No. 5

Presentación del Álbum

Grabado en un concierto público el 22 de septiembre de 2016 por la Orquesta Sinfónica de Londres y su director Gianandrea Noseda, esta Quinta de Shostakovich cumple con creces las promesas de la partitura. Recordamos la desafortunada situación del compositor objeto de los venenosos ataques de la Pravda que, siguiendo órdenes del siniestro ustedes-saben-quién, destrozó su ópera Lady Macbeth en 1936; tuvo por tanto que retirar precipitadamente su Cuarta sinfonía del programa de la orquesta a punto de estrenarla –y la obra no se interpretó hasta el año 1962. Como respuesta, si se quiere, a las acusaciones de opacidad burguesa, de desviación anti-soviética y otras tantas gil… estupideces comunistas, Shostakovich se sumergió en su Quinta y la acabó en julio de 1937; la obra se estrenó sin tardar y con gran éxito no solo en la URSS sino en todo las salas de concierto del planeta que se arrancaban la partitura de las manos. Y sí, el lenguaje es mucho más claro y menos esotérico que el de la Cuarta, pero si buscamos un optimismo flagrante, naíf y sentimental... ¡ni en sueños! El Scherzo es una siniestra huida en adelante de un payaso bajo la tortura, el desgarrador Largo es precisamente... desgarrador, absolutamente. Y en cuanto al último movimiento, alterna farsa rossiniana y bruxismo mahleriano, antes de acabar con dos minutos de este tipo de alegría que uno siente mientras está laminado por una división de tanques soviéticos. Esta es la respuesta «entre líneas» que dio a los asesinos estalinianos mientras declaraba en la Pravda que su Quinta era la «respuesta práctica de un artista a une crítica bien merecida». ¡Fabuloso desplante! © SM/Qobuz