Mirapolis

Presentación del Álbum

Las Navidades de 2017 se han adelantado al 3 de noviembre para los fans de la música electrónica. Y es que cada entrega discográfica de Erwan Castex, alias Rone, supone un auténtico regalo. Cuatro años después de Tohu Bohu, preciosa misiva sonora escrita y enviada desde Berlín que le permitió dar a conocer su música y estilo, y dos años después del bello y desconcertante Creatures, nuestro avezado productor añade más niveles a su fascinante y electrónica torre de Babel. Y es que, desde luego, esa construcción citada en el Génesis constituye el mejor símbolo de su universo. Lejos de las pistas de baile, la música de Rone es como una edificación de muchos pisos donde han ido a confluir artistas tan dispares como Etienne Daho, François Marry (sin los Atlas Mountains), el atípico violonchelista Gaspar Claus, el igualmente inclasificable pianista Bachar Mar-Khalifé, Bryce Dessner de The National o incluso el japonés trompetista de vanguardia Toshinori Kondo... En este quinto trabajo, con portada a cargo de Michel Gondry y de su hijo Paul, Rone se rodea de John Stanier, del grupo Vacarme y, de nuevo, de Claus y Dessner, pero también del rapper-poeta contestatario Saul Williams, del refinado crooner Baxter Dury, de la israelita Noga Erez y de Kazu Makino (de Blonde Redhead). Tomados por separado, cada tema de Mirapolis es distinto al resto. Pero Rone, gran artífice de sonidos y formas, consigue dar una capa de homogeneidad a todas esas texturas musicales, a todas esa atmósferas, proponiendo un verdadero trip sensorial de resultados asombrosos. No siempre el electro es aquí el género predominante, pero qué importa eso si finalmente lo que escuchamos es expresión de un artista capaz de sonar con personalidad al margen de las etiquetas establecidas. © MD/Qobuz