El miniamplificador con conectividad a redes es un producto capaz de satisfacer las expectativas de un gran número de usuarios, sean audiófilos o no. En un formato poco aparatoso, reúne tanto el reproductor de música en red como la electrónica de amplificación para las cajas acústicas. Lo único que nos queda por hacer es añadirlas. El Bluesound Powernode es uno de los productos de referencia en este campo, y más aún en su versión más reciente, que acaba de llegar a nuestras manos.

El actual Powernode representa la cuarta generación de un producto que apareció en 2014. Bluesound no utiliza ningún signo distintivo entre versiones, lo que puede hacer que algunos se pierdan por el camino. El primer modelo tenía un diseño un tanto especial, en forma de diamante totalmente luminoso. El siguiente, convertido ya en plano, se llamó Powernode 2, al que siguió el Powernode 2i. El actual Powernode ya no tiene número. Se reconoce principalmente por su gran superficie táctil en la parte superior. Bluesound forma parte del grupo Lenbrook, que también incluye la veterana y prestigiosa NAD. La sinergia entre las marcas hace que la amplificación proceda de NAD y que los componentes de NAD estén equipados con conectividad a redes desarrollada por Bluesound. Así que tenemos un buen punto de partida. El resto de la gama Bluesound comprende cajas acústicas inalámbricas, un subwoofer, una barra de sonido y un reproductor de música en red sin amplificador. A modo de complemento, el pequeño Powernode Edge acaba de ser presentado como una declinación más estilizada, menos potente y ligeramente más asequible.

Características

Amplificador con conectividad a redes

● Precio: 999 € (en España)

● Potencia de salida: 2 x 80 vatios sobre 8 ohmios

● Distorsión armónica total (THD): 0’008 %

● Relación señal/ruido: 100 dBA

● DAC: 24 bits/192 kHz, MQA

● Conectividad: Wi-Fi 5, Ethernet, Bluetooth aptX HD (bidireccional), 2 entradas mixtas analógica para mini-clavija y digital óptica, 1 entrada HDMI eARC, 1 salida de auriculares para mini-clavija, 1 salida monofónica con conector RCA para subwoofer, 1 puerto USB

● Protocolos de conexión a redes: BluOS, AirPlay 2, Roon Ready, Qobuz integrado

● Otros: disponible en blanco o en negro, mando a distancia por infrarrojos opcional

● Dimensiones (An x Al x P): 220 x 70 x 190 mm

● Peso: 1’78 kg

Presentación general del Bluesound Powernode

A estas alturas ya estamos acostumbrados al diseño de Bluesound, que ha cambiado poco desde 2016. El Powernode es un aparato compacto, de sólo 22 cm de ancho. Está disponible en blanco o negro. No hay controles en el panel frontal. La línea divisoria horizontal incorpora un LED multicolor en el centro. Encima encontramos el logotipo de Bluesound, mientras que debajo está la toma de auriculares en formato mini-clavija.

Es, por tanto, la cara superior la que caracteriza a esta cuarta generación del Powernode. Una extensa zona brillante alberga varios controles táctiles organizados en tres hileras. Los cinco pequeños círculos corresponden a otras tantas preselecciones; por ejemplo, para activar muy fácilmente nuestra emisora de radio web favorita. Por debajo, la línea corresponde al control de volumen, con una indicación visual del nivel en curso. Y por último, las flechas se utilizan para navegar entre pistas, indicando el LED del panel frontal el estado actual.

El panel trasero incorpora un número suficiente de conectores para complementar las funciones integradas del Powernode. De entrada, encontramos dos entradas auxiliares para mini-clavija de 3’5 mm. Ambas son de doble formato: analógico y digital óptico, utilizando el cable de nuestra elección. A través del conector HDMI eARC es posible conectar una tercera fuente física, concretamente la salida de audio de un televisor. Una toma de salida monofónica con conector RCA está dedicada a la conexión de un subwoofer, cuyos ajustes asociados se encuentran en la aplicación móvil.

Un puerto USB situado justo encima de la toma Ethernet puede alojar una memoria o un disco duro externo. Toda la música contenida en ambos dispositivos será accesible desde la aplicación. Los archivos de audio Hi-Res reconocidos son los siguientes: FLAC, MQA, WAV, AIFF y MP4 SLS. Observemos asimismo la presencia de un puerto de infrarrojos para conectar un receptor remoto en el caso de que el Powernode esté escondido en un armario.

El Powernode se conecta vía Wi-Fi si no se dispone de la opción de conectarlo a una red por cable. Terminemos mencionando la presencia del Bluetooth bidireccional: el aparato recibe música por Bluetooth pero también es capaz de transmitirla a unos auriculares Bluetooth. De este modo, todo lo que se puede escuchar en las cajas acústicas se puede enviar a los auriculares de manera inalámbrica.

En el Powernode se ha instalado un módulo NAD HybridDigital en Clase D de 2x80 vatios. Esta potencia, que puede describirse como mediana, se obtiene sobre 8 ohmios y asciende a 220 vatios de pico sobre 4 ohmios. Bluesound da poca información sobre los componentes utilizados en el Powernode. Como mucho, se sabe que el DAC gestiona archivos de hasta 24 bits/192 kHz. En cuanto al procesador de gestión, debería ser lo suficientemente potente como para garantizar las actualizaciones y ganar evoluciones durante un cierto número de años.

Utilización del Bluesound Powernode

Los escasos controles del Powernode, pese a que tienen el mérito de existir para actuar rápidamente en caso de necesidad, fuerzan a utilizar la aplicación BluOS. Es dicha aplicación la que toma el control de todos los dispositivos no sólo de Bluesound sino también de NAD o DALI, tanto si tenemos un solo producto como una red de dispositivos y cajas acústicas en multisala. Ha evolucionado poco en estos últimos años. Muy completa, a veces se le reprocha su punto de complejidad extra. Cierto es que el menú vertical de la izquierda requiere más etapas que con una aplicación en la que el menú está siempre en la parte inferior de la pantalla. Se trata sobre todo de una cuestión de costumbre.

La instalación debe realizarse cerca del Powernode puesto que requiere una conexión Bluetooth al principio para que el aparato sea visible para la aplicación. A partir de ahí, todo es muy sencillo. En unas pocas decenas de segundos, el Powernode está listo para hacer trabajar a nuestras cajas acústicas. La pantalla de selección del aparato es accesible desde el pequeño icono de la casa que figura en la parte superior derecha. Pero no es aquí donde se configura. Las únicas funciones accesibles detrás de los tres puntitos permiten cambiar los ajustes de audio y enviar el sonido a unos auriculares Bluetooth.

El icono del menú que hay en la parte superior izquierda revela las diferentes fuentes disponibles. La primera opción concierne a las listas de reproducción. Son tanto las de Qobuz como las creadas específicamente en el aparato y que pueden mezclar títulos de diferentes fuentes: múltiples servicios de streaming y contenidos USB. Debajo, los preajustes sirven para memorizar varias fuentes favoritas que se pueden activar rápidamente. Las cinco primeras están disponibles en los botones correspondientes del Powernode, pudiéndose crear hasta 40. A continuación, los favoritos hacen honor a su nombre, con acceso a los álbumes, títulos, artistas y listas de reproducción a los que habremos otorgado una pequeña estrella.

El menú continúa con las fuentes “físicas”, que son las entradas auxiliares, HDMI y Bluetooth. Luego pasamos a las fuentes sin soporte físico con las emisoras de radio de Internet y Qobuz integrado. Se pueden añadir otros servicios, siendo la lista totalmente personalizable. Por último, terminamos con los parámetros que engloban todos los ajustes posibles para personalizar el Powernode, como por ejemplo el nombre del dispositivo, el brillo del LED del panel frontal, la conexión a carpetas compartidas en la red o incluso el modo de radio-despertador.

Es posible controlar el Powernode con cualquier mando a distancia por infrarrojos memorizando previamente sus códigos. Como alternativa, Bluesound comercializa un mando a distancia dedicado disponible opcionalmente. También hay que saber que el Powernode puede ser instalado en el corazón de un sistema de Cine en Casa. Gracias a su toma HDMI, recibe contenidos Dolby que descodifica y envía a cajas acústicas de sonido envolvente Bluesound, como por ejemplo el modelo Flex. También es posible conectarle por vía inalámbrica el subwoofer Bluesound SUB+. Todo esto lo convierte en una unidad central verdaderamente multifuncional.

La escucha

El Bluesound Powernode se basta por sí mismo. Hemos introducido nuestros datos de acceso para activar la reproducción de Qobuz, en Hi-Res 24/192 por supuesto. La integración es completa, con la práctica totalidad de rúbricas y el acceso en la app Bluesound a los diferentes contenidos editoriales. Como ya hemos detallado en nuestras pruebas de otros productos equipados con BluOS, esta aplicación es una de las que integra Qobuz de la manera más acertada. Simplemente conectamos al Powernode nuestra habitual pareja de cajas acústicas Dynaudio.

Comenzamos nuestras sesiones de escucha con los Caribean Nocturnes de Joachim Horsley, una grabación con ritmos variados de sonoridades tropicales. El Powernode exhibe una gran sensación de velocidad, como si la música saliera de las cajas acústicas de manera más pronunciada de lo habitual. Esto se traduce en una capacidad dinámica impresionante para un aparato de este tamaño y con una amplificación más bien modesta. El Powernode transmite a nuestras cajas acústicas una verdadera tensión en el más mínimo toque instrumental, que parece preciso y realista tanto en los apoyos como en las micro-resonancias que lo acompaña. El Powernode profundiza tanto en la música que nos permite focalizarnos fácilmente en cualquiera de sus componentes. El soul de Kennedy Williams en Just Another Story es reproducido con unos timbres precisos y elegantes. La voz destaca bien en primer plano, con los coros y los instrumentos en un segundo plano. En concreto, la escena sonora se distribuye entre las dos cajas acústicas sin que haya ningún hueco. Los instrumentos situados a la izquierda o a la derecha del centro están firmemente anclados en su lugar. Estas diferentes cualidades facilitan la legibilidad de la obra: no hay un todo mezclado sino más bien diferentes voces e instrumentos que pueden seguirse con claridad indistintamente.

El electro minimalista de Ströme sur No. 2  permite comprobar que el Powernode entrega una buena dosis de bajas frecuencias a nuestras cajas acústicas, unos graves dinámicos y matizados, bien sostenido con una agradable sensación de profundidad. Ningún género musical parece poner en apuros a este amplificador Bluesound. Al escuchar la Sinfonía nº 4 de Mahler dirigida por François-Xavier Roth, nos encontramos perfectamente en el ambiente requerido con una escena sonora de grandes dimensiones. La única –aunque pequeña- crítica concierne a una ligera falta de profundidad debida quizá a detalles que no llegan tan lejos como podrían en las frecuencias altas. Este es el criterio que puede hacer que queramos subir de nivel, ¿pero a qué precio? En cualquier caso, las ubicaciones siguen siendo precisas y realistas, sin ninguna crítica a la veracidad de los timbres ni ningún defecto que salte a los oídos, y eso es lo principal. Puntos fuertes:

- Cualidades sonoras soberbias

- Sensación de presencia excelente

- Control de los graves

- Integración de Qobuz en Hi-Res

- Conectividad muy completa

Puntos débiles:

- Absolutamente nada, con este precio

Conclusión

Nuestra memoria y nuestros apuntes siempre pueden fallarnos, pero no nos da la sensación de que hayamos sido tan seducidos por las versiones anteriores del Powernode. Sea cual sea el caso, este Bluesound Powernode es un verdadero logro desde cualquier punto de vista. No debería tener problemas para excitar una gran parte de las cajas acústicas disponibles en el mercado, ya se trate de modelos de estantería como de columnas de tamaño mediano. Y si alguna vez nos faltan los graves, la salida filtrada para subwoofer está ahí para solucionarlo. Hay ambiente, ubicaciones realistas y aire alrededor de los instrumentos. La guinda del pastel es que, al igual que sucede con los dispositivos HomePod de Apple, la pausa o el cambio a la siguiente canción van acompañados de un ligero fundido de sonido para que las transiciones sean menos abruptas. En resumen, para hacerlo tan bien como este amplificador con conectividad a redes “todo en uno” de Bluesound partiendo de componentes separados habría que gastar mucho más para esperar verdaderas ganancias sea cual sea nuestro género musical favorito... Traducido por Salvador Dangla