Concrete And Gold

Presentación del Álbum

A sus 48 años, Dave Grohl parece haber llegado a un momento crucial de su carrera. Crucial a partir de ahora. Tras ser condecorado con la Legión de Honor por sus méritos a los bombos en Nirvana, grabó el primer álbum de Foo Fighters en octubre de 1994, seis meses después del suicidio de Kurt Cobain. Más pop, pero no más sosegado que la música del grupo que le diera celebridad, este nuevo comienzo sigue resultando hoy impresionante. Pero progresivamente, disco a disco, las aristas de este rock & roll de matriz punk se irían limando en beneficio de unas sonoridades FM en muchos casos demasiado comerciales. A lo cual habría que añadir que la banda de Grohl fue cayendo gradualmente en actitudes de lo más autocomplacientes... Pero con Concrete And Gold se hace evidente que los Foo Fighters se han tomado un tiempo de reflexión. En declaraciones a los medios de comunicación su líder se ha sacado de la manga una de esas frases publicitarias que hacen la boca agua de los fans: «¡este disco es como el Sgt Pepper pero en versión Motörhead!». Y forzoso será confesar, una vez escuchado, que algo de ello hay. ¡Sobre todo teniendo en cuenta que Paul McCartney colabora en uno de los temas! Sí, así es, el antiguo Beatle toca la batería en Sunday Rain. Pero no es el único invitado inesperado presente en esta orgía metálico-pop: también encontramos a... ¡Justin Timberlake en Make It Right, Shawn Stockman de Boyz II Men en Concrete And Gold, Inara George de The Bird And The Bee en Dirty Water, Alison Mosshart de The Kills en La Dee Da y The Sky Is a Neighborhood, y el saxofonista Dave Koz en La Dee Da! Al igual que la portada-patchwork de Sgt Pepper, este noveno álbum de Foo Fighters dispara a todo lo que se mueve. Un eclecticismo de lo más gozoso conducido por la habitual tormenta de guitarras, pero con un sentido de la melodía pop más refinado de lo acostumbrado. Algunos temas se descubren incluso liberados de la habitual testosterona para dibujar unas volutas psicodélicas de lo más aromáticas… Misión cumplida, pues, por parte de Dave Grohl en lo referente a su deseo de renovación y al cuestionamiento de sus concepciones sonoras. © MD/Qobuz