Merrie Land

Presentación del Álbum

A manera de coproducción italo-norteamericana-franco-albanesa típicamente sixties, The Good, The Bad & The Queen cuenta con un reparto iconoclasta y verdaderamente de campanillas. Porque además de tener al frente al gran Damon Albarn, líder de Blur y Gorillaz, el nombre reúne a una verdadera artillería pesada de ex: Paul Simonon (ex-The Clash), Tony Allen (ex-Fela Kuti) y Simon Tong (ex-The Verve). Cuando esta evasiva banda apareció en 2007 con un álbum sencillamente bautizado The Good, The Bad & The Queen muchos aficionados se quedaron perplejos: ¿cómo? ¿una especie de banda sonora al modo Morricone con elementos de reggae, pop (cercano a los Kinks) y sonoridades de los 80? Y además el disco proponía el más insólito paseo por un Londres onírico pero marcado por los claroscuros de la época… Once años después el mundo no va mucho mejor, y el Brexit ha servido de inspiración a un Damon Albarn siempre dispuesto a opinar. Por eso TGTBATQ vuelve a la palestra con este Merrie Land. En cuya portada encontramos una foto del actor Michael Redgrave en El muñeco del ventrílocuo de Alberto Cavalcanti, uno de los episodios del film colectivo de 1945 Al morir la noche, que narra la historia de un ventrílocuo loco que cree que su muñeco está vivo y, digámoslo así, es una criatura altamente inmoral. ¿Se tratará de una alegoría actual? Y como productor de esta segunda parte tenemos a Tony Visconti, sustituto de Danger Mouse, que ofrece un balance algo más sosegado y que subraya tanto la melancolía de las melodías como la mordacidad de las letras. Ciertamente, en esta atmósfera desencantada y sarcástica el cerebro de Blur y Gorillaz se desenvuelve como pez en el agua y nos recuerda de nuevo su amor por Ray Davies de los Kinks, su ídolo confeso. © Marc Zisman/Qobuz